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Sardinas a la plancha con salsa de mostaza |
Dice
la letra de la canción “Sabor de amor” de Danza Invisible… “besarte es como
comer naranjas en agosto y uvas en abril…”. Pues bien, sabiendo un poco sobre frutas, sospechamos que
esos besos no sabrán precisamente a amor, tal como reza el estribillo de la canción: difícil encontrar
ricas naranjas en agosto y buenas uvas en abril.
Sírvanos
esto para reflexionar sobre la temporada de los alimentos y cuándo los deberíamos consumir.
Actualmente
podemos encontrar en el mercado gran variedad de alimentos frescos durante todo
el año, aunque en muchas ocasiones éstos no estén en su temporada, por lo menos en nuestro hemisferio. Pero
tenemos que reconocer que cocinar y comer alimentos de temporada tiene sus
ventajas: más facilidad para encontrarlos, mejor precio y mejor calidad.
Y
es un tema que ya viene de lejos. Simone Ortega ya incluyó
en su libro “1080 recetas de cocina”,
cuya primera edición data de 1972, un calendario de productos alimenticios.
Incluso con anterioridad, en 1950 cuando se publicó el libro “Manual de
cocina” de Ana
María Herrera, en el que las recetas viene clasificadas como “Minutas
diarias de comida y cena propias de cada estación”.
Aparte
de las dos fuentes que os hemos citado, existen en la web numerosas páginas en
las que podéis encontrar calendarios de temporada de alimentos. Aunque también
podemos optar por algo más tradicional, preguntar y dejarnos aconsejar por los
antaño conocidos como “tenderos”.
Y
siguiendo los consejos de nuestra pescadera nos llevamos para casa unas muy
apetecibles sardinas.